Un grupo de adolescentes programadores, apasionados por la tecnología y el emprendimiento, crearon Qaizen, la solución para problemáticas como el bullying o la depresión en las escuelas secundarias. Dos de ellos, Lorenzo Marquesini y Valentín De Antonio, son vecinos de nuestro conjunto residencial Dalvian.

Qaizen –tal el nombre de la App web- es una plataforma en línea en donde los alumnos de las escuelas secundarias pueden reportar a su institución cualquier tipo de problema que estén atravesando (ellos o algún conocido), desde el bullying hasta el acoso o grooming o la depresión adolescente que puede llevar al suicidio. Además, los creadores destacan que al tratarse de una aplicación web, no necesita ningún tipo de descarga; el link es https://www.qaizen.org/.

Sus fundadores, Marquesini (17 años) y De Antonio (16), comenzaron a trabajar en este proyecto en agosto del año pasado. Unos meses después se incorporó al equipo otro joven, Matías Cuneo (17).

En poco tiempo de trabajo, fueron seleccionados por la Company Builder AWA-VENTURES (perteneciente a la empresa desarrolladora de software, Wakapi) entre 69 proyectos de base tecnológica, para desarrollar su programa de incubación y aceleración de empresas, recibiendo su primera inversión a un mes de su lanzamiento oficial.

Hoy ya cuentan con el apoyo de referentes del sector académico, tecnológico y emprendedor, como Paz Álvarez (CEO de Zavia Bio); Julián Bensadon (director AWA-VENTURES y ex director de Operaciones en Endeavor Cuyo) y el colegio Maristas San José.

Lorenzo Marquesini, alumno de Maristas, contó que la idea surgió “por una situación que ocurrió en la escuela de Valentín (DAD), un intento de suicidio en un recreo, fue muy impactante y a partir de ahí surgieron muchas charlas respecto a la salud mental en los adolescentes y en nosotros salió crear esta aplicación para mejorar la comunicación ya que con una mejor comunicación se pueden prevenir este tipo de situaciones”.

Y explica que Qaizen es una plataforma en línea “donde los alumnos pueden ingresar un código a su escuela y así comunicarse para informar distintos problemas que pueden ser acoso, abuso o incluso temas de salud mental como la depresión; y también temas que pasan todos los días en las escuelas como problemas con las notas, en el trato con los profesores o entre compañeros”. Allí se incluyen casos de bullying, lamentablemente habituales en el ámbito escolar.

Lorenzo reconoce que “empezamos a trabajar en esto y al poco tiempo se fue formando en un sistema más complejo”; de ahí que el aporte del nuevo integrante, Matías Cuneo, fue crucial: “Es un chico muy talentoso que va a la ETEC y nos ayuda mucho con el proyecto”, cerró.